Estamos en alerta naranja y el calor es insoportable. No entiendo a la gente que le gusta este clima. Sevilla es una maravilla pero no con estas temperaturas. A pesar de que algunos bares pongan en sus terrazas agua vaporizada, el hielo se derrite tan rápidamente que el Whisky sabe a Coñac.
En verano soy un enamorado de Asturias o de Santander tierra del Almirante Bonifaz, que en pleno Agosto rompió las cadenas — seguramente calientes— que hicieron posible la conquista de Sevilla.
P.D. Hace dos años publiqué este post que seguramente hoy también sería actualidad.https://eduardobrionesgomez.com/2013/07/04/reirse-de-la-calo/