Tengo que reconocer que lo primero que me llamo la atención cuando vi a la mujer de los tacones amarillos y vestido corto azul, no fue su sonrisa a la hora de posar.
Tengo que reconocer que lo último que me llamó la atención cuando vi a la mujer de los tacones amarillos y vestido corto azul, fue su figura.
Tengo que reconocer que lo primero que me llamó la atención cuando vi al niño con gorra roja fotografiando a la mujer con tacones amarillos y vestido azul, fue su destreza a la hora de coger la cámara fotográfica.
Tengo que reconocer que lo último que me llamó la atención cuando vi al niño con la gorra roja fotografiando a la mujer con tacones amarillos y vestido azul, fue cuando miraba el resultado fotográfico de su trabajo.
Tengo que reconocer que lo primero que comenté cuando vi a la mujer de los tacones amarillos y vestido corto azul, fue lo grotesco de la situación.
Tengo que reconocer que lo último que comenté cuando vi a la mujer de los tacones amarillos y vestido corto azul, fue lo divertido que había sido el espectáculo.
Tengo que reconocer que lo que pienso ahora cuando veo la fotografía que le hice ayer a la mujer de los tacones amarillos y vestido corto azul, siendo fotografiada por el niño de gorra roja es que la felicidad está en disfrutar de uno mismo.
Hermosa!