La Biblia dice que Dios creo las plantas al tercer día, esperando al sexto para crear al hombre. No se porqué el primer trabajo que Dios asignó a Adán fue ponerle nombre a los animales, (esto también lo dice otro Dios de la música, Bob Dylan, “Man gave names to all the animals”), supongo que el ponerle nombres a las plantas habría sido la siguiente tarea si no hubiera sucumbido a una fruta nacida de un árbol. No sé si Adán le regaló una flor a Eva después de perdonarla por el tremendo error que a sabiendas o no, había cometido, pues está claro que el divorcio era algo imposible en aquella época.

Desde el principio de los tiempos las flores han sido la mejor vía para transmitir sentimientos, vivencias e ilusiones. Hoy, 23 de septiembre, cuando oficialmente se va el verano y llega el melancólico otoño, me despido de la estación estival con una flor que me trasmite sentimientos y aromas de amores lejanos y cercanos.

No me resisto a pasar delante de esta flor y no arrancarla para regalársela a la persona que quiero, por eso, si Dios me hubiera dado el encargo de dar nombre a esta flor la hubiera llamado jazmín pues este nombre significa; “regalo de Dios”.