Un viejo exclama: «¡Dios mío, porqué me has quitado la fuerza y no las ganas!» Entre las muchas aficiones frustradas que tengo, una es la pintura. Siempre me ha atraído este arte, pero mi deseo nunca se ha correspondido con mi habilidad. Por eso cada que vez que veo a un pintor callejero me paro y lo observo y con una envidia sana contemplo su obra. En esta ocasión fue curioso que lo que más me llamó la atención fue su mesa de trabajo, cuando le pedí permiso para fotografiarla me comentó que a él también le encantaba la composición de colores que por azar producía armonía. «¡Dios mío, porqué me has quitado la habilidad y no el gusto!»
Month / agosto 2013
Desconchón
Cuando paseas por el Barrio de Santa Cruz te encuentras a turistas fotografiando lo obvio para los sevillanos, o sea, la luz y el contraste. Hoy buscando las fotos para un proyecto que tengo en mente he estado visitando uno de los barrios más singulares de Sevilla. Coincidiendo que estaba hablando por teléfono con mi amiga Mariluz, le he interrumpido la conversación y le he dicho que esperara un momento que había una foto muy bonita, ella con el cariño que me tiene me ha dicho qué todas las fotos que hago le encantan, algo que me llena el ego, a pesar de que soy consciente de que su percepción sobre mi obra no es nada objetiva. ¡Eso es amistad y lo demás es poesía!.
Mariluz, esta es la fotografía por la que he interrumpido nuestra conversación. ¡Hasta el desconchón de la pared me gusta!. ¡Qué suerte tengo de ser amigo tuyo pues hasta mis «desconchones» te gustan!
Composición
El arte consiste en construir; no es destruir. Esta foto es un ejemplo de ello, aunque tengo que reconocer que la hice, no para denunciar a las pandillas de graffiteros que con sus símbolos y destrozos del mobiliario urbano pretenden marcar su territorio, sino porque la composición del conjunto me llamó la atención.
El río
Cuando quiero buscar la paz mental me voy al río. Sus aguas y sus orillas siempre me han cautivado. Cada reflejo me recuerda a lo vivido. Cada corriente me trae esperanza.Todo es armonía y calma. Nada desentona, su paciencia es infinita y sus aguas son un bálsamo de tranquilidad.
¡Qué suerte tengo de vivir en una ciudad donde el río me hace suyo!
Diferentes medios de transporte
Los medios de transporte más antiguos son el carro tirado por animales y los barcos. La evolución ha hecho posible que sigan perdurando en el tiempo aunque con diferentes tecnologías. En Sevilla, el coche de caballos y el crucero, son utilizados para hacer turismo por la ciudad.
¡Bienvenido sea a nuestra ciudad todo aquel que quiera visitarla independientemente del medio de transporte que elija para llegar a ella!.
El beso.
El Palacio Real de Estocolmo no es algo que impresione por su decoración y creo que esa es una de las razones principales por la que no te dejan hacer fotos, como ya conté cuando escribí sobre el, pero a pesar de todo hay una escultura que cada vez que la veo me sigue llamando la atención. Está justamente debajo de unas escaleras. Buscando en internet, no encuentro ni el título de la obra ni a su autor, seguramente eso signifique que no tenga mucho valor y claro, esa es una de las razones por las que no me dedico a ser marchante de arte; porque a mi me gusta.
Si la escultura me impresionó al pie de la misma, más me atrajo desde esta posición elevada, pues parece que los amantes hayan buscado un lugar discreto para besarse apasionadamente. El beso es un acto sublime, donde el universo se para cuando se juntan los labios, y se cierran y se abren los ojos al unísono para dejar que la imaginación fluya libremente sin ningún tipo de cortapisas.
Cuando esta mañana he vuelto a ver esta fotografía he cerrado los ojos y he visto en la cara de la mujer de esta estatua a la persona que quiero.
El Giraldillo oxidado
Entre las muchas noticias que han inundado mi mente esta mañana hay una que me ha llamado la atención y no por impactante sino por sorprendente. En su artículo de ABC, Aurora Flores, nos cuenta como el «Giradillo«, colocado hace tan solo ocho años en lo alto de la «Giganta» después de su proceso de restauración (desde 1999 al 2005) por supuestas manos expertas y cuyo coste ascendió a 600.000 euros; da muestras de oxidación. Pero lo verdaderamente sorprendente es que en el año 1770 fue cuando se le hizo la penúltima restauración, o sea, que con los conocimientos y la tecnología que se tenía en el siglo XVIII la escultura de bronce duró 200 años y con la actual tan solo 8 años.
Ya se que habrá muchas voces expertas que con leguaje experto darán una explicación experta que a los profanos en la materia nos dejará sin argumentos para la réplica. Pero a pesar de todo, me pregunto asombrado cuando he terminado de leer el artículo de Aurora Flores, ¿dónde está el sentido común de los expertos?.
Cuentan que cuando iniciaron las obras de la Catedral, un canónigo pronunció la frase: «Fagamos un iglesia tal e tan grande que los que la vieren nos tomen por locos». Espero que nadie cuando llegara en el año del señor de 1999 a la sede del Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico (IAPH) pronunciara una frase parecida cambiando unas palabras: «Fagamos una reconstrucción tan «güena» que los que la vieren nos tomen por tontos».
P.D.: La foto que muestro la hice en primavera cuando restauraron la fachada norte recuperando la configuración original del ladrillo visto. Hice la foto pensando como verían nuestros antepasados el Giraldillo desde la calle de Las Gradas, o como se conoce en la actualidad; la calle Alemanes. Así que si alguien no ha visto esta fachada recuperada, se tiene que dar prisa, pues ya se sabe lo que duran las restauraciones modernas.
Los pájaros y la vida contemplativa
Hoy son de esos días que como decía Serrat en una canción: «no hago otra cosa que pensar en ti y no se me ocurre nada». Después de haber ido a la playa a darme un solo baño, comer en el «Quinto Pino» y volver a Sevilla para dormir una siesta, he estado pensando en que fotografiar y escribir hoy sábado cuando la estadística dice que me leen pocas personas y no se me ocurre nada.
Llegando a Sevilla, me he encontrado junto al puente del Quinto Centenario una gran cantidad de pájaros posados en los cables eléctricos, me gusta la fotografía cuando se juntan los planos de los cables y los tirantes del puente, pero no se como relacionarlo con ninguna historia, o sea, como la vida misma.
«El Veleta».
Habré pasado por la Capillita del Carmen una infinidad de veces. Para mi, ha sido siempre una referencia cuando estoy fuera de mi ciudad y me acuerdo de ella. Desde allí, llevo varios años viendo como los Reyes Magos entran por Triana. Subir un Domingo de Ramos, Lunes Santos y Viernes Santo por la mañana y por la tarde para fotografiar a las cofradías señeras de Triana, es un privilegio difícil de agradecer a la hermandad de la Virgen del Carmen que tan amablemente me dejan ascender a su pequeña pero maravillosa torre.
A pesar de lo que acabo de escribir, tengo que confesar que hasta ayer no me di cuenta que en la veleta de la torre principal se encuentra una figura. ¿A quién representa?. Os dejo la explicación escrita por un bloguero de Triana.
«Una madrugada, se había escapado un toro de un rebaño que se dirigía a Sevilla y el sereno, en cumplimiento de su deber, se encargó de avisar del peligro existente a los transeúntes, con tan mala fortuna que recibió una embestida del animal. Al contar lo sucedido en la enfermería, Marchena aseguraba que pudo ver los palos de los barcos desde lo alto de los tejados. A partir de entonces, se le apodó como «El Veleta» y para honrar tal acontecimiento, se encargó a la Fundición Portilla White que realizara una veleta en hierro forjado con la silueta del sereno, con su chuzo y su farol. Esta veleta fue colcada en la torre de la antigua Capilla del Carmen como recuerdo del popular sereno Marchena.
Tras su derribo y por iniciativa del periodista López San Miguel, se recuperó la original veleta y se colocó en la nueva capilla construida por Aníbal González. Años más tarde y sin tener datos de cómo ocurrió, la figura del Veleta desapareció de lo más alto de la torre de la Capilla del Carmen.
Luna llena
Ayer vi la película «On the Road», basada en un libro de Jack Kerouac, que leí hace tan solo cinco años cuando mi amiga Rosa, me lo regaló por mi cumpleaños. Como la mayoría de las adaptaciones de obras maestras y sobre todo cuando se tienen que recrear los años 50, el film deja mucho que desear con respecto al libro, aunque tengo que reconocer que el personaje de Neal Cassady, está soberbiamente interpretado por el actor Garrett Hedlund. Cuando terminé de ver la película me puse a «bichear» por internet, para conseguir información del libro y la película y así contrastar mis impresiones con el ciberespacio. Como una cosa lleva a otra en un un blog que se llama; «entremontonesdelibros», descubrí un post titulado; «Fragmentos literarios», y allí leí lo siguiente: «Gracias a La historia del loco se que antiguamente la gente creía que si te dormías con la luz de la luna en la frente despertaba loco. De ahí procede la palabra lunático».
Como eran las 8,30 de la noche y había luna llena, me fui a la calle Betis a ver salir la luna por la Maestranza. Hoy en facebook he leído un comentario de Marina Bernal que ponía lo siguiente: Luna llena…noche de lunáticos…
On the Road, internet, la calle Betis y facebook ha hecho posible que escriba un post lunático.