Estando ya en el yacuzzi, hemos decidido probar la piscina y claro, desde ese momento ya somos parte del entorno. Sabiendo lo que todo eso conlleva hemos dejado los prejuicios aparcados en Sevilla y las dos primeras cervezas las hemos tomado rodeados de cruceristas, solo nos faltaba cantar la canción con la que George Dans popularizó; «el crucerito, el crucerito,como me gusta crucerear «.
Mi forma de ser no está cambiando, no os preocupéis, simplemente estamos adaptándonos a las circunstancias. Incluso ayer ya fuimos a la cena en la que te sientan con una pareja que no conoces de nada y tienes que charlar de lo divino y lo humano. Realmente no me costó mucho trabajo mantener una conversación distendida pues hablamos de Urdangarín, la corrupción, los trabajos, los niños, la vida de pareja y por supuesto de mi Betis. El único problema fue que a la pareja compañera no le gustaba beber y por lo tanto nos dejaron que disfrutáramos del resto de la noche solos en una discoteca, donde la música era tan mala que ni los jóvenes, ni los puretas bailaban. Indudablemente esto no es lo mío. Nadie que me conozca lo dudará. Ahora me dispongo a ir a la fiesta de la cerveza, y después Dios dirá, porque a la cena del Capitán, que es hoy, va a ir su…
Bien que haces en no ir a la cena del capitán. Es un timo. 😀
Disfrutad mucho del lugar… la adaptación es una forma de aprendizaje y os aseguro que se aprende de cualquier situación. Eso sí, también descubres que al belleza está en el interior 😛 🙂
Jajajaja, me parto! Reconozco que soy de las que siempre digo que ni de coña viajo en crucero y menos hago «nuevos amigos» en esas cenas tan amenas, pero «visto lo visto» con niño de 2 años y lo económico que están me parece a mí que va a caer un veranito de estos…niño yo quiero ver una fotito tuya vestido de gala en la cena del capitán, jajaja
[…] esta imagen del momento que siempre conservaré en mi retina; las noches blancas en medio del mar Báltico que para los que pasan continuamente por allí se convierte en algo rutinario y que para mi fue […]